“Presidente trinquetero, te robaste mi dinero” le cantan burócratas a Walter Valenzuela
Comondú, BCS.-Ahora sí se enojaron los burócratas de Comondú y se lanzaron a la calle bajo un calor infernal, para cantarle al presidente municipal de Morena, Walter Valenzuela Acosta: “Presidente trinquetero, te robaste mi dinero”.
Fue el martes 6 de abril, cuando un numeroso grupo de trabajadores sindicalizados del gobierno municipal, así como policías municipales que también se encuentran en paro de labores, exigieron que se les paguen quincenas y prestaciones que se les adeudan.
En voz de su dirigente, Cecitly Navarro Martínez, los trabajadores exigieron una respuesta a sus demandas, por parte del Alcalde, el Secretario General, el Tesorero, e incluso la Síndica y los Regidores, porque estos firmaron el acta donde se estableció el acuerdo de pago que no se cumplió.
Visiblemente molesta, la dirigente sindical también manifestó su inconformidad porque el Alcalde “casi nos dijo güevones que nada más estamos abajo de un árbol”.
Los inconformes marcharon desde las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, en la avenida Hugo Cervantes del Río, hasta llegar al bulevar Agustín Olachea, donde siendo este continuidad de la carretera Transpeninsular, vio interrumpida la circulación por algunos momentos, hasta que la numerosa caravana llegó a la calle Reforma, donde se dispersó.
De acuerdo a algunas versiones, el gobierno que encabeza el morenista Walter Valenzuela, se encuentra a la espera de una respuesta de la Federación, que entraría en su rescate, luego de que el gobierno estatal le dijo que no podía apoyarlo, debido a que no cuenta con recursos extraordinarios por parte del gobierno federal y ante la reducción de ingresos debido a la pandemia.
Los trabajadores de base llevan lo que va del año, y un poquito más, manifestando su inconformidad por el retraso en el pago de sueldos y prestaciones, estimándose que actualmente el Ayuntamiento de Comondú requiere al menos de 30 millones de pesos para cubrir los adeudos más inmediatos, lo cual se antoja como una misión imposible. (Por: Arturo Nieves).