Más de 370 trabajadores de la SSA en BCS solicitaron resguardo domiciliario por tener factores de riesgo
La Paz.-Actualmente la Secretaría de Salud (SSA) en Baja California Sur padece las consecuencias de tener en activo a trabajadores jubilados, ya que en este momento de pandemia, todos han tenido que dejar de laborar al encontrarse dentro de los factores de riesgo debido a la edad y otros padecimientos que presentan.
Durante años esa ha sido una de las polémicas que existen al interior del sector salud, al considerarse que hay personas que ya se jubilaron, que reciben una pensión y encima obtienen un sueldo, quitándole la oportunidad a jóvenes que no han podido obtener una plaza dentro de la estructura y si bien les va, se quedan como eventuales o de contrato, recibiendo sólo una mínima compensación.
Recientemente el gobierno del Estado determinó darle seguridad social a 326 trabajadores de la salud que estaban bajo contrato, así como mejorar sus ingresos, lo cual significó un paso importante a quienes en la actualidad se encuentran en la primera línea de la lucha contra el Covid-19, dentro de los hospitales.
Sin embargo, hay otros que han dejado de laborar porque de acuerdo a disposiciones gubernamentales, los mayores de 60 años no pueden acudir en las instituciones públicas, debido al riesgo de contagio que enfrentan con su condición de vulnerabilidad por la edad, pero también por padecer enfermedades como la diabetes, hipertensión, obesidad y las inmunosupresoras.
Actualmente 371 trabajadores de la Secretaría de Salud han solicitado resguardarse en sus domicilios, debido a esos factores de riesgo, lo que adelgaza la estructura humana para enfrentar distintos padecimientos, incluyendo el coronavirus, ya que en esta cifra se incluye a médicos, enfermeras y administrativos, entre otros.
“Tenemos gente de 40 y 45 años de servicio y sí, nos debilita nuestra plantilla laboral”, reconoció el secretario de Salud del Estado, Víctor George, aunque precisó que algunos de ellos laboran en áreas específicas de ciertas patologías, que actualmente están fuera de servicio, debido a la contingencia sanitaria.
Expuso que por ejemplo el hospital Salvatierra, que es el principal centro médico de la entidad, se han retirado 127 trabajadores; de la Jurisdicción Sanitaria 03 de La Paz, que es la más grande de la entidad, han dejado de laborar 73 personas, mientras que en el hospital de San José del Cabo 27 y de Cabo San Lucas otros 21 trabajadores.
Lo malo que es algunos de estos trabajadores que solicitaron el confinamiento domiciliario, a pesar de los factores de riesgo ya mencionados, han aprovechado la circunstancia y se han dedicado a trabajar por su cuenta, en lo privado, incluyendo médicos y enfermeras.
Al respecto, el Secretario de Salud lamentó esa actitud y les pidió que respeten los motivos de la autorización para que se retiraran a sus casas, aunque mencionó que afortunadamente esos casos son los menos.
Durante años, en la SSA ha habido esa pugna laboral, porque no todos los trabajadores tienen acceso a las mismas condiciones laborales, en gran parte debido a la dualidad normativa que existe, ya que por un lado son regidos por el gobierno federal y por el otro, por el estatal.
Uno de los puntos que cuestionan los trabajadores regularizados, bajo contrato u otras categorías, es que hay plazas o cargos que son ocupados por trabajadores que desde hace años son empleados de la Secretaría de Salud, pero ya se jubilaron y reciben una pensión, pero también un sueldo.
Reconocen que salvo contados casos donde por la experiencia y el conocimiento de determinadas áreas, es importante contar con gente así, muchos son cargos operativos que pueden ser desempeñados por personal más joven, al cual se le debe dar la oportunidad de hacer carrera en el sector. (Por: Arturo Nieves).