Deben empresas reforzar vigilancia sanitaria
La Paz.-La designación de trabajadores que tengan la actividad exclusiva de vigilar la seguridad e higiene por Covid-19 en los entornos laborales, es uno de los requisitos obligatorios que deberán cumplir las empresas de la construcción y minería, así como establecimientos y prestadores de servicios complementarios, para estar en condiciones de retomar sus actividades a partir del 1 de junio.
El personal que reciba esta encomienda, deberá cursar en primera instancia una capacitación elaborada por la Secretaría de Salud (SSA), para que adquiera los conocimientos básicos, lineamientos e identificación de casos, de tal manera que pueda notificar oportunamente a la institución estatal, para que de esta manera, emprendan acciones de control sanitario ante alguna eventualidad, indicó el titular del ramo, Víctor George Flores.
La Secretaría de Salud (SSA) de la entidad, estableció esta disposición con el objetivo de que al interior de las empresas que forman parte de estos sectores esenciales, existan trabajadores que verifiquen el cumplimiento de los protocolos sanitarios elaborados por Coepris; permitiendo detectar compañeros que pudieran presentar esta infección respiratoria, de tal manera que puedan canalizarse el resguardo domiciliario para evaluación médica, y de esta forma realizar la toma de muestra y en caso de ser positivo, emprender el estudio de contactos para evitar brotes.
“Es una estrategia definida por el Comité Estatal de Seguridad en Salud para reducir y mitigar riesgos de transmisión del nuevo coronavirus ante la movilidad que generará la reapertura de estas actividades”, explicó el Secretario, al abundar que el responsable de seguridad e higiene en el trabajo tendrá que capacitar a sus compañeros sobre las medidas de prevención y autocuidado a seguir en las jornadas.
Los cursos comenzarán a impartirse de manera presencial el 1 de junio en los cinco municipios, pero en breve se desarrollarán en formato en línea para ampliar su cobertura, aseguró Víctor George, al recordar que la población que no desempeña actividades esenciales deberá preservar el esfuerzo del resguardo domiciliario, para evitar un crecimiento desmedido de casos que pudiera propiciar la saturación de servicios hospitalarios.