Por lluvias, a enfrentar Covid-19 y dengue juntos; después la influenza
La Paz, BCS.-Ante las recientes lluvias generadas por el huracán “Genevieve”, crece la amenaza del dengue para los sudcalifornianos, que ya de por sí se encuentran sitiados por el Covid-19, y más adelante también se avizora el riesgo de la influenza, lo que será una tripleta con la que deberán lidiar las autoridades de salud.
De esta manera, el escenario en materia de salud para la entidad se torna más complicado, como lo reconoció el secretario de Salud del Estado, Víctor George Flores, durante la rueda de prensa a través de plataforma digital, quien apuntó que además, la similitud de los síntomas complicará la identificación de los padecimientos.
“Sabemos que el Covid-19 tiene diferentes manifestaciones, desde asintomáticos hasta cuadros graves, pero también algunas manifestaciones son diarreas y dolor de huesos, entonces es un poco complicada la identificación”, sostuvo el funcionario estatal.
Expresó que las autoridades de salud enfrentarán el compromiso de atender juntos al Covid-19, el dengue, zika y chikungunya, y la influenza una vez que llegue el invierno, lo que complica aún más el escenario de salud en Baja california Sur.
Aunque las lluvias se presentaron de manera copiosa más que nada en Los Cabos, donde se tendrá que realizar una intensa labor de saneamiento para prevenir el dengue, la realidad es que el sector salud tiene diseñada la estrategia contra ese padecimiento de manera cíclica en todo el Estado, porque es en verano cuando más prolifera el mosco trasmisor, ante la acumulación de agua al aire libre.
Como se sabe, el Dengue es causado por un virus trasmitido por la picadura de un mosco, en tanto que el Covid-19 y la influenza, se contagian de persona a persona por gotas de saliva o de mucosa, sin embargo los síntomas son similares, con fiebre, dolor de cabeza, músculos y huesos.
Para buscar controlar el dengue, zika y chikungunya, es necesario detener el desarrollo de las larvas que crecen en depósitos de agua, principalmente a cielo abierto, mientras que para la influenza se aplica anualmente una vacuna, debido a que cada año hay una cepa nueva, en tanto que para el Covid-19 no hay cura y todo depende de la constitución física de las personas y los cuidados personales.
Víctor George, expuso que antes que pensar en la influenza, en este momento la principal preocupación es controlar al Covid-19, y casi en lo inmediato viene el dengue, porque la entidad se encuentra ya en la temporada de lluvias, por lo que se trabaja con brigadas recorriendo los domicilios a fin de hacer las recomendaciones sobre el patio limpio y el retiro de cacharros y recipientes al aire libre.
Reconoció que una vez que termine la temporada de calor, a finales de septiembre y principios de octubre, se empezará a enfrentar el problema de las enfermedades respiratorias y con ello, la lucha contra la influenza, que es un padecimiento que llega a ser mortal.
En ese sentido, explicó que actualmente, al practicarse la prueba para detectar al coronavirus, también se corre la detección de influenza en la misma muestra, con el fin de descartar o confirmar estos padecimientos, como una manera de anticiparse a ese riesgo inminente.
Destacó que afortunadamente el huracán no generó una situación de desastre, como estaba previsto, porque eso hubiera complicado aún más la situación del Covid-19, al ocasionar mayor afluencia a los hospitales, la escasez de agua que es vital para la higiene, y la movilidad que esa situación propicia, para dotar de bienes y servicios a los afectados.
“Lo que sigue es que se nos presente el dengue, chikungunya y zika, y pues, para la influenza hay vacuna, por lo que hay que vacunarse porque cada año hay una cepa diferente, y hay que protegerse, principalmente los grupos vulnerables”, comentó el funcionario estatal. (Por: Arturo Nieves).